[Ramonismo 132]
Yuliana Ortiz nos traslada a un espacio lleno de fuerza en el que los protagonistas se hunden en su territorio
HAY libros que tras leer unas pocas líneas ya son capaces de transportarte a otra realidad, haciendo partícipes al lector de una visita a un ámbito telúrico el que las personas forman parte de un territorio que todo lo engulle, debido a su torrencial potencia natural y a las características sociales y culturales de sus habitantes.
El debut en la
narrativa de la poeta Yuliana Ortiz (Esmeraldas, Ecuador, 1992) es
uno de esos textos que, rápidamente, te envuelven con sus historias,
en gran medida por el deslumbrante manejo de un lenguaje capaz de
transmitir una identidad colectiva singular y todo ello acrecentado
por el tratamiento de unos personajes y sus relaciones en el ámbito
de la comunidad, que parecen brotar de la propia tierra desde la que
sus cuerpos cobran todo su sentido y vigor.
Publicado por La
Navaja Suiza, editorial siempre atenta a proponer nuevas voces que
surgen de Latinoamérica, planteando sugerentes escenarios narrativos
desde una renovación de la tradición de todos esos países tan
ricos en literaturas y narraciones orales, ‘Fiebre de carnaval’
es un exuberante ejercicio literario que narra diferentes
acontecimientos en un barrio desde el que una adolescente descubre el
universo de los adultos en base a diferentes experiencias con sus
propios compañeros de edad, pero también aportando su mirada al
universo de los adultos en un proceso de crecimiento personal en el
que no siempre es sencillo comprender ciertas cuestiones y
comportamientos de esos mayores, incluso los miembros de una familia
que aquí se presenta como ese espacio de protección frente a lo
externo, así como el primer ámbito de enseñanza.
Yuliana Ortiz vive en
Guayaquil y es Licenciada en Literatura y Artes, DJ de música afro
del Pacífico ha publicado, además de diferentes textos en revistas
y antologías, tres libros de poemas. Estas líneas no solo revelan
la precocidad y talento de su autora, sino que al mismo tiempo nos
ofrecen una serie de itinerarios que, como pequeños afluentes, se
encuentran al desembocar en las páginas de ‘Fiebre de Carnaval’,
en una corriente de una mayor intensidad, en un sólido experimento
narrativo que, por un lado, emerge de esa fortaleza de la Literatura
Hispanoamericana por reflejar ámbitos muy determinados en donde lo
territorial y lo humano destilan una fuerza que el escritor transmite
al lector con todos sus giros lingüísticos, con la potencia del
hábitat natural y con las costumbres propias de esa comunidad de
personajes. A ello se le suma la sonoridad que también recorre todo
el texto, cargado de sones y ritmos que parten, no solo de un
determinado empleo de un lenguaje lleno de musicalidad, sino también
a canciones y músicas que rodean esa celebración carnavalera y, por
último, y no menos importante, en el texto también aflora mucho de
la capacidad poética de su autora, generando pasajes que, como
luciérnagas alumbran en las densas noches del Trópico, siendo
capaces de producir una serie de imágenes que acaban por hipnotizar
al lector sumido ya de manera irreversible en la propuesta de Yuliana
Ortiz.
No deja de ser emocionante este encuentro con nuevas
propuestas literarias, voces o escrituras que aportan una frescura
muy en consonancia con nuestra realidad y con la mirada y el sentir
de jóvenes generaciones que, sin perder la intensidad y calidad
literaria, aportan un refrescante y necesario progreso en las
tradicionales narrativas de sus marcos geográficos y humanos.
‘Fiebre de carnaval’ es, de esta forma, una entrada perfecta a sentir lo que subyace en el territorio ecuatoriano a través de la escritura de Yuliana Ortiz y de una invocación a la memoria, a los recuerdos y secretos que se generan en el ámbito humano, capaces de proponer un espacio literario en el que no siempre es sencillo desarrollar posteriores textos. La personalidad de esta autora permite consolidar en estas páginas ese recorrido vital, generando en el lector toda una geografía física y humana en la que, pese a la distancia con nuestras realidades europeas, se acaban reconociendo toda una serie de similitudes que anidan en el interior de todos nosotros y que forman parte del inevitable proceso de experimentación y crecimiento que significa la vida, y es que si algo rezuma este libro es vida.
Publicado en Revista. Diario de Pontevedra 5/11/2022
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