‘Galicia
y los escritores hispanoamericanos’, publicado por la coruñesa ‘Ediciones del
viento’, es un feliz recopilatorio de textos realizados por diferentes
escritores hispanoamericanos en la búsqueda de registrar sus sensaciones sobre
la tierra gallega.
EL
SIGLO XIX se caracterizó por ser el de la conquista de las primeras libertades
del ser humano, entre ellas, la de la libertad para viajar, para experimentar y
conocer lo que sucede en territorios y realidades diferentes. Pintores,
escritores o científicos de diversas ramas se lanzaron a recorrer Europa para
registrar lo que sucedía en numerosos rincones, como inspiración para su
trabajo, pero también por el deseo personal de descubrir nuevos escenarios.
El
proceso descolonizador sufrido por los países sudamericanos fue convirtiendo a
España en uno de esos destinos, en un viajar y reconocer de primera mano lo que
sucedía en aquel otrora imperio que los había sometido. La visita del
referencial Rubén Darío a España en 1892 se entiende como un punto de arranque
para que otros escritores crucen el Atlántico y busquen en España, más que un
destino exótico (a diferencia de otros viajeros europeos ellos procedían de
territorios mucho más deprimidos), una suerte de exorcización de su pasado, de
su propia condición como descendientes de aquellos que hasta allí se
desplazaron.
El
vínculo de Galicia con Latinoamérica no precisa ya de demasiadas explicaciones,
desde Cuba hasta el Cono Sur, aquellas geografías humanas estaban íntimamente
ligadas a lo que sucedía en Galicia, convirtiendo a la emigración en un lazo
irrompible que llega hasta nuestros días. Pero muchos autores decidieron
realizar el camino contrario, pisar Galicia, descubrir que había detrás de los
más diversos mitos o relatos orales que poco o nada tenían que ver, en la
mayoría de los casos, con lo real, pero a los que ellos se afianzaban como el
sustento con la realidad de un pasado que los envolvía en una especie de bruma
sentimental.
De la
mano de José Esteban, este volumen recopila interesantes textos fechados en el
siglo XX (excepto el de Rubén Darío-1899-), a cargo de escritores que buscaban
desentenderse de mitos, aliviar neblinas, pero sobre todo, como apunta José
Esteban en el prólogo, «sus viajes son en busca de ellos mismos», intentando
dar así respuesta a su propia identidad, a aquello que en buena medida los
puede explicar.
Tras
la lectura de sus comentarios algunos de ellos continuarán alimentando ese
mito, haciendo de la geografía, el clima o la tradición un recurso estilístico
y emocional para quienes les leen desde sus países de origen, pero otros,
enhebran a Galicia con la modernidad del momento, con otras capitales europeas,
sobre todo ciudades como Vigo o A Coruña, y pretenden desenterrar tópicos sobre
nuestra identidad. Especialmente afortunado en sus comentarios es el escritor
guatemalteco Enrique Gómez Carrillo quien recorre Galicia en 1919 y escribe
textos sobre Santiago y su carácter religioso, las hadas, las mujeres de A
Coruña, la rivalidad entre Vigo y Pontevedra, el carácter de los gallegos,
vendido siempre como triste y haciéndose una pregunta sobre el terreno: ¿Cuándo
sois tristes?, al encontrarse con una gente alegre y divertida, habladora y
bien educada, y finaliza su aportación con una evidencia casi actual, sobre
porque la gente visita tan poco Galicia y desde Madrid se eligen destinos como
París, poniendo de relieve las malas comunicaciones entre la capital y Galicia.
Otros
autores eligen la compañía de escritores como Valle-Inclán, Ramón Cabanillas,
Fernández Flórez o Fernández del Riego para palpar esa identidad gallega.
También visitando ciudades de las cuatro provincias, puertos de mar, mirando a
los cielos, tocando a los árboles, escuchando hablar gallego, pisando piedras
centenarias, en definitiva, intentando extraer todo el latir de una tierra
poniendo los pies en ella. Chile, Nicaragua, Cuba, Venezuela, Uruguay,
Argentina, ... patrias de nombres como los de Luis Ross, Rubén Darío, Jorge
Mañach, Pascual Venegas, Leonor de Miranda, Roberto Arlt o Ricardo Rojas,
firmantes de unas crónicas sobre un tiempo y una tierra.
Publicado en el suplemento cultural Táboa Redonda. Diario de Pontevedra y El Progreso de Lugo 13/03/2016
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